La República Dominicana atraviesa por un importante cambio de paradigma con la obligatoriedad de la facturación electrónica en el país. Ante esto, muchas empresas han recurrido a la contabilidad outsourcing y a la externalización de otros servicios para adaptarse al cambio tecnológico de manera más rápida.
La facturación electrónica ha sido probada con éxito en la mayoría de los países latinoamericanos, en donde ha mejorado la transparencia en las transacciones comerciales y facilitado el cumplimiento tributario. Modernizando así la Administración Tributaria.
No obstante, la transición hacia la emisión de facturas con Comprobantes Fiscales Electrónicos (e-CF) no es un proceso sencillo para las empresas. Pues implica desafíos como una fuerte inversión tecnológica, capacitación del personal, un mayor control de la información, entre otros que a continuación te contamos.
La República Dominicana comenzó a implementar el modelo de Facturación Electrónica (FE) a partir de febrero del 2019 con un plan piloto que concluyó de manera exitosa en diciembre del mismo año. En enero del 2020, se promulgó la Norma General 01-2020, para regular la emisión y el uso de los e-CF.
Hasta ese momento, la FE fue un proceso voluntario, pero el 16 de mayo de 2023 se promulgó la Ley no. 32-23, que estableció su uso obligatorio en el país.
De acuerdo con la Dirección General de Impuestos Internos (DGII), a partir de la digitalización de trámites y servicios, se produjo una mejoría en el cumplimiento de los principales impuestos de la administración tributaria. En el cuatrimestre enero-abril del 2023, se registró una recaudación acumulada de RD $253,429.4 millones, para un cumplimiento 103.3 por ciento, una cifra RD $8,144.6 millones por encima de los RD$245,284.8 millones estimados para este periodo.
Además, el uso de la FE en otros países de LATAM ha demostrado otros beneficios como:
- El aumento de la ventaja competitiva de las empresas
- Fomento de una sociedad justa con un ambiente de negocios más saludable
- Formalización de la economía y la transparencia fiscal
- Contribución al cuidado del medio ambiente
En este panorama, las empresas de República Dominicana ahora tienen la obligación de implementar de manera escalonada la FE, de acuerdo con el calendario de fechas de implementación de los contribuyentes. Los primeros obligados son los grandes contribuyentes nacionales, los cuales se dividieron en tres grupos con diferentes fechas límites de implementación.
El pasado 15 de enero del 2024 se venció el plazo para el primer grupo de grandes contribuyentes. No obstante, en diciembre, los datos mostraban que 396 de las empresas convocadas a reportar su facturación de manera electrónica no habían tomado ninguna medida al respecto.
Sin duda, esto se debe a que la transición implica retos complicados, incluso para las grandes empresas. Para hacerles frente, aquí te compartimos los beneficios que pueden brindarte herramientas como la contabilidad outsourcing y un servicio de impuestos especializado.
El sector de tecnología en República Dominicana carece de mano de obra calificada, al punto que, a la fecha, solo puede cubrir las necesidades del 52.33% de las empresas registradas en el Directorio de Empresas y Establecimientos de la ONE (Oficina Nacional de Estadística). Por esta razón, uno de los principales retos para las empresas y, en especial para las mipymes, es la adquisición de nuevas tecnologías y de talento especializado para utilizarlas.
En el caso de la emisión de los e-CF, los contribuyentes requieren de un software de facturación que les permita generar la factura en el formato estándar XML y según las especificaciones técnicas de impuestos internos.
Para ello, es recomendable tener el apoyo de un servicio de impuestos externo y de una contabilidad outsourcing, ya que, de esta manera, la empresa puede contar con la asesoría de expertos y disponer de las mejores tecnologías para el proceso de facturación, de manera más rápida y a un precio más accesible.
Otro de los retos para las empresas es cumplir a tiempo con los plazos establecidos por la DGII para la facturación electrónica. Esto es importante, sobre todo para las mipymes que, a menudo, no suelen tener su información financiera en orden. Lo que puede retrasar el proceso.
No obstante, con un outsourcing, la empresa puede ensamblar todas las partes de su contabilidad, con la ayuda de expertos que también se encarguen de cumplir con los requisitos exigidos a los contribuyentes para la FE, tales como:
- Estar inscrito en el Registro Nacional de Contribuyentes (RNC)
- Tener autorización para emitir comprobantes fiscales
- Estar al día en el cumplimiento de obligaciones tributarias
- Disponer de certificado digital para procesos tributarios, emitido por una prestadora de servicios de confianza
También es importante que las empresas verifiquen que su software de facturación cumpla con las normas y especificaciones técnicas establecidas por el Ministerio de Hacienda, y que esté registrado en el Registro Nacional de Proveedores de Software de Facturación Electrónica.
Esto no es problema cuando se tiene un servicio de impuestos, ya que este se encarga de que sus softwares cumplan con todos los requerimientos estipulados por la ley para la FE. Además, los proveedores de outsourcing suelen contar con certificaciones como la ISO 9001, Sistema de Gestión de la Calidad, para garantizar la mejora continua y la eficiencia de los procesos de sus clientes.
Finalmente, la implementación de la FE también puede complicarse, debido a que, en ocasiones, es necesario reestructurar la información contable y financiera con base en los nuevos requerimientos legales y tecnológicos. Sin embargo, esto puede simplificarse al tener una contabilidad outsourcing que garantice:
- La correcta determinación, transparencia y presentación de la información financiera de la empresa
- El almacenamiento y respaldo seguro de las facturas
- La integración de la FE con el sistema de contabilidad y el servicio de nómina, para evitar duplicidad de trabajo y errores
Sin duda, con la facturación electrónica, las empresas dominicanas podrán obtener beneficios como la reducción de sus costos operativos, el ahorro de tiempo y una mayor eficiencia en sus procesos administrativos. Además, la DGII otorgará un incentivo fiscal a quienes cumplan con el calendario de implementación.
El monto variará de acuerdo a la clasificación del contribuyente y podrá usarse para compensar los anticipos del Impuesto sobre la Renta, ITBIS operacional, ISR y el impuesto sobre los activos. En el caso de las mipymes, el incentivo puede llegar a ser de hasta RD $300,000.00.
Por el contrario, las empresas que no cumplan con los requerimientos establecidos por la DGII para la FE podrían acarrear multas de 5 a 30 salarios mínimos e, incluso, la suspensión de concesiones, privilegios, prerrogativas y el ejercicio de sus actividades, según la gravedad del caso.
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March 11, 2024